Productos de belleza masculinos

Dicen que las mujeres son las reinas de los productos de belleza. Y así es, porque son las que más consumen y gastan en estos artilugios, bien para tonificar, cuidar, realzar o maquillar su cuerpo. Algunas se ponen cremas de baba de caracol. Otras optan por el veneno de serpiente. Las más perversas hasta se embadurnarán en semen... Y los hombres no nos hemos quedado muy atrás (en eso último no sabría decir...), y las vamos alcanzando poco a poco. Según un estudio publicado por el diario británico Daily Mail, los varones nos gastamos 266 euros al año en productos de belleza.

Hace ya años que las mujeres no buscan un hombre tosco, rudo, de apariencia desaliñada y con más ojeras que elegancia. Tampoco los hombres en sus parejas homosexuales, que siempre han caído más en el tópico de que se cuidan más que los heterosexuales. Según este estudio, el 46,4 % del género masculino ya utiliza productos de belleza a diario, y el 50 % de las mujeres han revelado que han “pillado” a sus maridos o novios usando sus cosméticos, correctores y maquillajes.

Limpiar, tonificar e hidratarse ya no es solo cosa de mujeres. Gracias a Dios. Lejos quedó el mito de que un hombre maquillado vale menos. ¿Acaso no nos parecen varoniles y muy atractivos los modelos de las revistas, los actores de las películas y los presentadores de televisión? Pues todos van maquillados. Arreglados. Impolutos. Y es gracias a los productos de belleza.

Mejor ir paso a paso, deben pensar muchos señores. Pero ya hay metas conseguidas: el 70 % dice que se hidrata a diario, o bien con cremas de día o de noche. Pero eso sí, el 20 % dice que utiliza estos productos “a escondidas”. Pero, ya que nos ponemos, nos ponemos en serio: el estudio afirma que el 43 % de los varones utilizamos los productos de belleza más caros de todos los que encontramos.

Y eso suponiendo que vayamos nosotros, porque el 40 % de las mujeres encuestadas en esta investigación afirma que son ellas las que compran cremas para sus parejas y el 21 % dice que sus novios o maridos se avergüenzan de adquirirlos y no se lo dicen ni a sus amigos. Aún quedan barreras por romper. Pero que no se nos rompa la piel. Hay que cuidarla.

¡FELIZ DÍA DEL ODIO A TODOS!

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