Pascua (Gala 11 - GH 12+1)

Noemí ha vuelto a salvarse de la expulsión una semana más. Ya da igual que las encuestas de todo internet la dejasen fuera de la casa y con gran diferencia. Este tipo de  encuestas se equivocan porque, para empezar, cualquiera puede votar y gratis. Yo mismo voté por Noemí en un par de sitios que frecuento. Pero nada. La audiencia votante decidió ayer, con un 56% de los votos, que el expulsado fuese Juan. No voy a decir que me diese mucha pena porque Juan, como sabéis, me sobraba bastante en esa casa. Pero me dio muuucho coraje. ¿Pero qué lleva a alguien a votar para que se quede Noemí? Es algo incomprensible.

Mucho más coherente fue la repesca. El jueves en el nuevo horario y día del Debate, pudimos saber que los cuatro finalistas para la repesca eran María, Cristian, Michael y Arístides. Pobre de mi Ochoa, pensé. Finalmente los dos primeros han conseguido esa codiciada plaza y esta semana tendrán que convivir con sus compañeros que, el próximo ¿lunes? ¿jueves? ¿junes? ¿lueves? decidirán si se queda la una o el otro.

Para postre, esta semana sí han superado la prueba semanal. Tendrán comida por primera vez en tres semanas. Fantástico. La prueba nos dio grandes vídeos y momentazos, que es lo que siempre debería ocurrir. Como premio, esta semana voy a volver a las Crónicas temáticas. La Semana Santa ya ha comenzado. Estamos en Pascuas, señores, y yo me voy a dejar llevar por esta fiesta religiosa y sus tradiciones. ¿Habéis cogido ya vuestros manteles a cuadros? Pues… ¡ADELANTE!

MERCEDES MILÁ: 0 PUNTOS. Si la semana pasada puntué a la presentadora por derrumbarse en plató y provocarme una empatía que desconocía, en esta ocasión ella inicia la Zona Roja. A estas alturas nadie desconocerá que Mercedes se ha operado el pecho. Entre las veces que lo dice y las que los muestra (insinúa), estamos hasta las narices de sus dos pechotes. Anoche iba disfrazada de morcilla del infierno y, querida Mercedes, en Pascuas te recuerdo que se come pescado, no carne. Tampoco me gustó nada su comportamiento con Ochoa, Arístides y Cristian. Cómo se nota quién le cae bien y quién no. Pues a mí ella no me cae bien. Y por eso le pongo un ceraco enorme esta semana.

JUAN: 0 PUNTOS. El cura motero fue expulsado anoche. Lo hizo por la puerta grande, con una entrevista que valió por la de él y la de Berta. Paradojas de la vida, cuando Pepe fue el primero en acudir a la Sala de Expulsiones, Juan comentó a viva voz: “siempre se van los mejores”. Cita curiosa cuando Juan ha nominado a Pepe semana sí, semana también. Pues al final el expulsado fue él. Y de mejor no tiene nada. Monseñor Juan se ha pasado toda la semana interpretando un papel de víctima que no le pega nada. Decía sorprenderse ante las críticas de Marta y Pepe hacia su persona. ¿Acaso él no ha estado haciéndole un traje a Pepe todo el concurso? Juan ha vendido su imagen de Santo pero algunos hemos logrado ver que tiene también un poquito de Lucifer. Estoy a favor de una Iglesia Católica con curas casados y con hijos. Y que no tengan que esconderlos. Pero lo de Juan me pareció excesivo. Sobreactuado. Esos momentos de erecciones sin disimular que nos ofrecía me parecieron patéticos. Si los hubiera hecho Cristian, estaríamos diciendo de él que igual se cree un macho. Que era repugnante. Pero Juan, como es cura, nos pareció gracioso. Pues ya no sonreirá más en esa casa. Y tal y como se ha comportado, yo le recomiendo que se recorra esta semana toda Andalucía de procesión en procesión. Con un paraguas, claro.

SINDIA Y PEPE: 0 PUNTOS. Tanto va el cántaro a la fuente, que al final se rompe. Tanto juegas con fuego que al final te quemas. Algo así les está ocurriendo a estos dos. Desde que entró Zergio con Z de Letizia Sindia es otra persona. Mucho más amargada. Mucho más cabizbaja. Sólo cuando se quedó un tanto perjudicada (borracha perdida) logró mostrar su verdadera cara. Déspota y fría con su novio. Distante y calculadora. Del mismo modo se muestra Pepe con ella, pero por otro motivo diferente. El maletín se le escapó a Zergio en el mismo momento en que entró al concurso. A Sindia se le ha ido escapando conforme ésta hacía desplantes a su novio. Y si Pepe se posicionara y tomara partido o se mostrara algo más, también lo perdería. Y el bailaor es muy consciente de ello. Aquí todos tienen su estrategia y, a menos que te venga un contratiempo muy inesperado, la puedes seguir con facilidad. Aquí lo malo es que el día que Zergio se vaya, Sindia puede que no resucite en esa casa. Y Pepe la traicionará cual Judas Iscariote. Es el A-B-C de la Biblia, señores.

NOEMÍ: 0 PUNTOS. La canaria esquiva finalmente el puesto de Odiada de la Semana. Un respiro momentáneo que le doy pese a que ha tenido casi la mitad de las papeletas para lograrlo. Noemí es como el grano en el culo que tiene la Tarara, una canción popular que sólo oigo en Pascuas, gracias a Dios. Esta semana ha estado enfrentada a Alessandro. Le dijo que él “viene de prestado” y que no le gustaría nada que se acostara con otras (ejem….). Pero por si nos quedaban dudas de su maldad, ese momento de “aquí hay amor” que cantó a Pepe y Sindia en medio de la fiesta nos terminó de asesinar. Hacía medio minuto que Zergio había dicho “a España” que entre él y Sindia ya no había nada. Y Noemí pensó que si ella en dos meses ha podido querer a tres hombres y acostarse con todos, por qué no iba a poder hacerlo Sindi. El asco que me da esta #noemiguarruza es incalculable. Pero ya he optado por la indiferencia de ni hacerle caso. Increíble que se salvara anoche. Y tampoco está nominada. Increíble.

HUGO: 1 PUNTO. Julia lo abandonó la semana pasada. Anoche se reencontró con María. Así es Gran Hermano, poniéndote siempre a prueba. La eterna sonrisa que no podía desdibujar de su cara ya nos ha dejado claras dos cosas: la primera es que Hugo sigue teniendo una sonrisa preciosa. La segunda es que en dos días va a tener que flagelarse como los beatísimos (y loquísimos) que tanto han pecado durante el año. Esta semana repite puntito solitario. Veremos lo que aguanta.

ARIADNA: 2 PUNTOS. Ariadna es tan incoherente como los católicos andaluces. En abril aguas mil, dice el refrán. Y que la lluvia en Sevilla es una maravilla. Sin embargo, los andaluces no aprenden de un año para otro, y siguen dejando sus procesiones y sus pasos de Semana Santa para cuando más peligro existe de no poder realizarlos. Todos los años hay alguna cofradía que no puede salir a la calle. Pero ellos erre que erre. Les aconsejo unas Pascuas en agosto. Claro que ir con los capuchones en agosto puede provocarles una lipotimia del quince. Algo similar le ocurre a Ariadna. Anoche se lanzó a los brazos de Michael como una loca descosida, aunque éste al final no fuese el repescado (bien!). Y nominó a Marta y a Pipi. Y se apenó por la expulsión de Juan. No tiene dos dedos de frente, no señor. Pero como la mayoría de sus compañeros son peor aún, al final tengo que puntuarla. De verdad…

CRISTIAN: 3 PUNTOS. El grandísimo Cristian ha vuelto a la Casa. Imaginamos que sólo por esta semana, pero lo disfrutaremos al máximo. El de Orihuela (un beso para Orihuela!) es como la tradición de romperle el huevo duro de las monas a alguien en la frente. Cuando eres joven te hace gracia, pero cuando llegas a una edad te revienta. Quizá yo todavía soy demasiado infantil y por eso me hace gracia este tipejo con un humor tan de pandereta. Qué se le va a hacer. Al menos a éste te lo ves venir, no como a la desquiciada de Noemí.

MARÍA: 5 PUNTOS. La jerezana también cae mal al público femenino, pero no por su machismo sino por envidia. Pero aquí lo gracioso es que el público femenino de la casa sí la adoran. Sindia y Marta se volvieron locas. También Ariadna. Incluso Noemí, pero porque su falsedad no tiene límites. Los chicos también encantados de poder disfrutar de ella una vez más. Especialmente Hugo. Y quizá también Alessandro, que anoche al salir del Confe con ella la agarró de la cintura. La tentación siempre es la tentación, sea en Pascuas, Navidad o Halloween. Y María es puro pecado carnal.

DANI: 7 PUNTOS. Al parecer, a Dani tampoco le importaría mucho tener que pecar con María. Si él nos lo dice, nosotros nos lo creemos, y punto. Dani es desquiciante como intentar volar una cometa sin viento. Es alegre como un niño ante una mona con un huevo Kinder. Es fresco y dinámico, como una primera acampada en plena adolescencia. Si es que me lo como. Cómo me alegra que no saliese nominado. ¡Bien!

MARTA: 10 PUNTOS. Con Cristian dentro, Marta vuelve a estar en el punto de mira. Si nos sigue cayendo en gracia él, y le da por enfrentarse a la de Albacete, ella puede salir perdiendo. Esta semana ha sido crucial para ella, ya que su amiguísima Sindia ha estado de bajón y ella se encontraba en la tesitura de ayudarla o ir también a animar a Pepe. Y ha hecho ambas cosas. Y muy bien, por cierto. Esta chica es completamente adorable. Un diamante –ya no en bruto- que nos enseña que la primera impresión no siempre es la acertada. Y que hay que conocer bien a los demás para juzgarlos. Toma sermón que os acabo de soltar.

ALESSANDRO: 12+1 PUNTOS. La semana pasada recibí un comentario en Blogger de un anónimo diciéndome que era una lástima que con mi locuacidad (textual) siempre terminase dando la mayor puntuación al buenorro de la casa. Agradecí el comentario por el mero hecho de serlo, pero no por el mensaje que me transmitía. Esta absurdez de que sólo puntúo a Alessandro por estar tremendo es equiparable a los que dicen que una empresa pública o privada debería tener los mismos hombres y mujeres al mando. No. Lo siento pero no. El puesto del favorito semanal hay que ganárselo. El hecho de ser mujer no te va a sumar más puntos. Ni tampoco el hecho de tener unos oblicuos irresistibles y una sonrisa perfecta. Doña Pilar Ochoa, gerente de un Hotel, fue la favorita durante tres semanas. ¿Acaso ahora también soy bisexual? ¿Por qué Ariadna es la segunda concursante con más puntos en lo que llevamos de concurso? No, no se sostiene la teoría de que sólo puntúo al chico sexy. Alessandro es mucho más que eso. Nos lo demuestra cada semana con todos los concursantes, pero especialmente con Noemí. Parece que ya está diciendo basta, pero el italiano ha aguantado carros y carretas de la canaria, y los que le quedan por ver cuando salga de la Casa, espero que como ganador. Este chico tiene el cielo ganado por su carácter afable, tranquilo, tolerante y simpático. Por su inteligencia. Por su dulzura. Por él. Sin más.

SERGIO: -1 PUNTO. Y si Alessandro tiene el cielo ganado, Zergio con Z de Letizia parece que está en las nubes. Yo no entiendo qué hace todavía en la casa, cuando este chico sobra desde antes de poner un pie en el jardín. Tiene completamente intimidada a Sindia. La acosa. Tal cual. Le pide besos y se los da aunque ella diga que no los quiera. La persigue sin cesar por toda la casa. No le deja el más mínimo espacio. Y encima le recrimina cualquier gesto o movimiento que ella haga. Por favor, que lo echen ya. Los trapos sucios se airean en casa, en la de cada cual, no en la de Gran Hermano. Si no se da cuenta de que lo único que va a conseguir es que ella termine odiándolo (como yo), es que es rematadamente imbécil. Lo que pasa es que él quiere amortizar el dinero de la excedencia que ha pedido para trabajar (vía El Gato Encerrado) y es altamente probable que tampoco quiera quedar como un idiota si sale voluntariamente. Pero es peor, porque está quedando como un cansino bobalicón que es peor que Antonio Banderas en El Zorro (ojo, que Antonio Banderas también es muy de Pascuas, ¿eh?). Yo no lo aguanto más y por eso lo he rebajado esta semana al Odiado de la Semana. Y a ver quién lo sube ahora.

La que subió fue la audiencia de Gran Hermano en cuanto a porcentaje. Ha acortado casi medio millón de espectadores su distancia a El Número Uno, que anoche volvió a vencer sólo por otro medio millón más de espectadores. Veremos qué decide Telecinco. Yo, sin duda alguna, volvería a dejar a Gran Hermano los jueves. Es su día. Y no hay vuelta de hoja. Pero como no se sabe lo que harán, yo me despido de vosotros hasta no se sabe cuándo. Eso sí, prometo Odiar mucho otras cosas, que estas últimas semanas no he tenido tiempo y el blog se está convirtiendo en un monográfico de GH que no me gusta nada. Os quiero. Digo… os Odio.

¡FELIZ DÍA DEL ODIO A TODOS!

Roberto S. Caudet