La noticia ha saltado como una bomba entre los taxistas de
todo el país: El titular del Juzgado de lo Mercantil número 2 de Madrid ha
ordenado este martes 9 de diciembre de 2014 el “cese y prohibición en toda
España de la aplicación Uber”, que pone en contacto online a usuarios y conductores de esa empresa para
desplazamientos. Se trata de la medida cautelar propuesta por la Asociación Madrileña
del Taxi y planteada de forma previa a la futura demanda que va a interponer
esta organización contra la mediática Uber, que ya opera en Madrid, Barcelona y
Valencia, aunque en esta última ciudad, el servicio seguirá en funcionamiento, según asegura el diario VLC News. El juez del caso ha aceptado la petición, argumentando que “los
conductores contratados carecen de autorización administrativa alguna para
desarrollar este servicio” y aduce además que la actividad que llevan a cabo
“supone competencia desleal”.
Para los que no estéis puestos en las App de moda, Uber pone en contacto a usuarios y conductores (a los
que no obligan a tener licencias o permisos para transportar a viajeros) que
pretenden hacer cualquier tipo de viaje a través de su página web o del propio smartphone del cliente y, luego, se
queda con un porcentaje del precio de la carrera. La compañía, de origen
estadounidense, ha sido criticada mundialmente por este tipo de taxis
adulterados y sin licencias y, de hecho, en España, aunque solo opera en 3
ciudades, ya ha habido una auténtica guerra abierta a la empresa, ya que en
Barcelona hasta aparecieron coches quemados de Uber hace unas semanas. En
Bélgica, Holanda y Nueva Delhi, Uber ha sido terminantemente prohibida por Ley.
La decisión de eliminar a la empresa de nuestro país ha
levantado especial polémica desde que se ha conocido la noticia, ya que la
medida se ha adoptado de manera cautelar sin escuchar la visión de defensa de
Uber, dado que “se trata de una empresa domiciliada en el paraíso fiscal
estadounidense de Delaware”, apunta el diario El País. El juzgado madrileño ha ordenado “paralizar el uso de
cualquier aplicación, soporte, sistema tecnológico o informático para prestar
el servicio de transporte de viajeros de Uber en España”. Ahora la duda es: ¿Es
auténtica competencia desleal? Algunos pensarán que todo se debe al lobby de los taxistas, dueños y señores
del actual monopolio del transporte privado de nuestro país, regulado por cada
Comunidad Autónoma y que, en algunos casos, se ha llegado a comparar con
mafias. Sin embargo, estos taxistas poseen de licencias costosas y de permisos
exclusivos que, les avalan para ese monopolio. ¿Podrá Uber finalmente funcionar
en nuestro país?
@RobertoSCaudet
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