No sé muy bien cuándo, pero al final estos rebotes de niñato
consentido, hedonista y maleducado acabarán pasando factura a Justin Bieber.
Hace meses ya fue multado por varios países por llevar a su mono encima todo el
día, animal que fue incluso detenido en una aduana. Tan sólo unas semanas
atrás, veíamos un vídeo del cantante orinando en una fregona de un restaurante,
después de una cena con amigotes y, suponemos, bastante cantidad de alcohol.
Justin no se cortaba en absoluto y se decidía a hacerlo en “público”, mientras,
de paso, se metía con el expresidente de los Estados Unidos, Bill Clinton.
Pero sus hazañas siguen sin tener fin. Se le ha visto
desfasado en los conciertos, está decidido a enseñar más carne que nunca.
Todavía no consigue tener una relación formal y se tatúa el ojo de su madre
“porque ella siempre lo está mirando”. Su última aventura ha sido en un hotel
de Toronto, donde iba a dar un concierto esta semana. El jueves apareció en el
balcón de su habitación para saludar a las docenas de fans que estaban
esperándole a que saliese o hiciese cualquier movimiento.
Como buena estrella del pop, Bieber se decidió a salir unos
minutos, para saludar, mandar dos besos y fotografiar a las fans allá abajo,
subir su foto a redes sociales y que ellas se sintiesen lo más. Pero, cual ha
sido la sorpresa, que el artista empieza a escupir, ante la mofa de sus amigos,
que se ríen de su ocurrencia. Las fotos han sido captadas por un paparazzi y no
dejan lugar a dudas. Justin Bieber se puso a escupir desde el balcón a sus
fans. ¿Pero este tipo quién se ha creído que es?
Hoy es el día en que me ha tocado incluirlo en mi lista de
Odio, que ya asciende a más de 300 artículos desde que lo inicié. Dentro de
nada haré una renovación íntegra del blog y su diseño. Pero, tranquilos, que
seguirá habiendo mucha ironía, acidez y Odios varios como el que se ha ganado
hoy Justin Bieber con su estúpido comportamiento, que, para más locura, no le
ha hecho perder a ni un solo miembro de la legión de fans que tiene. Al final,
tendrá razón Bieber, y sus fans son muy baby, baby, baby… Oh.
¡FELIZ DÍA DEL ODIO A TODOS!
