Continuamos el camino hacia las mejores canciones de
Eurovisión 2013. Hoy hacemos otra parada para conocer otras cinco
representantes de lo más mediocres. Se trata de las cinco candidatas que sólo
obtienen un aprobado raspado. Tres de ellas son de países que, generalmente, no
parecen esforzarse mucho en esto de gustar. Las otras dos, en cambio, dan un
bajonazo importante. Los más asiduos sabréis de mi amor por cierto país que el
año pasado se vio forzado a no participar por seguridad internacional. Y seguro
que todos habréis disfrutado bailando y cantando ese himno que ya es “La la
love”. No digo más. ¡Pasemos a la revolución!
32º BULGARIA
La letra es machacona hasta morir. El estribillo se clava
peor que La Macarena. El
videoclip es especialmente cutre, con esa única emoción que consiste el
descubrir cuándo van a cambiarle de nuevo el vestuario a la vocalista. Pero el
juego de los tambores es entretenido. Y vistoso. Y la canción en sí no es la
más mala, al menos tiene su gancho, con esos toques tan orientales y que tanto
me gustan. No la pasaré a la
Final, pero no me molestará escucharla en su Semifinal.
31º LETONIA
Las que tienen facilidad para mojar bragas van a encontrar
en Letonia su fuente de votos. Cuesta encontrar al cantante con camiseta. Es la
versión anoréxica y rubia de Mario Casas. El chico no es feo para nada, aunque
con la poca ropa que lleva suele cagarla bastante. Su estilazo parece
patrocinado por Norma Duval. La canción no es pésima, pero nadie querrá volver
a escucharla ni siquiera un poquito. El estribillo es simplón pero alegre.
¿Habrá que tener miedo a estas sorpresas que a veces pasan sin saber muy bien
por qué?
30º CROACIA
Si alguien logra identificar las siete diferencias entre la
canción que representa a Croacia y la música de fondo de un restaurante chino,
que me avise. Los croatas no nos ofrecen, ni mucho menos, la mejor balada de
este año. Pero tiene un encanto especial que no me disgusta nada. Sin embargo,
más allá de la base melódica, la canción se desinfla con facilidad y no logro
recordarla cinco minutos después.
29º CHIPRE
Dice la leyenda que Chipre no me gusta dos años seguidos. Y
superar el “La la love” era toda una empresa. No le quito méritos a Despina,
porque creo que hace una interpretación preciosa de la canción. Y tiene una voz
francamente notable. Pero es que la balada me aburre soberanamente. No
sorprende, no crece, no evoluciona. Es tan lineal y tan sosa que me inspira lo
mismo que si pasa un carro. Qué mal, Chipre. Qué mal!!
28º ARMENIA
Probablemente, el mayor batacazo que me he llevado este año
(después del español) ha sido el escuchar el tema de Armenia, uno de mis
grandes favoritos. Dos años ha tenido Armenia para pensarse la actuación de
2013. Recuerdo que el año pasado no quiso participar por motivos de seguridad,
ya que se celebraba en el país ganador, Azerbaiyán, cuyo gobierno encarceló a varias docenas de personas por votar a Armenia en la Final de Eurovisión 2009.
Pues bien, este año han vuelto con un tema que no llega a ser rock, no llega a
ser una balada, y tampoco llega a gustarme. El estribillo tiene algo, lo
reconozco. Pero dudo que en el escenario eurovisivo y en directo sepan
conquistarme lo más mínimo. Una pena, francamente. Tenía a Armenia en un
pedestal.
Mañana nos pasearemos por otros 5 países y, como pista, os
diré que poco vamos a movernos del centro de Europa, salvo para un viaje
contado. Eso sí, recorreremos el continente de Norte a Sur. No digo más,
tendréis que esperar un poco para conocer a las clasificadas entre el 27º y el
23º, todas menos una ya dentro de mi soñada Gran Final. Hasta entonces, odiad
mucho, pero no me odiéis a mí.
¡FELIZ DÍA EUROVISIVO A TODOS!