Podría definir de muchas maneras la gala que vimos anoche en
Telecinco de La Voz, pero sólo se me
ocurre hablar de bochorno. Porque no
hubo un fallo, ni una mala decisión, ni un gesto un poco feo. Es que no paró de
haberlos. Este primer directo del programa ha dejado un mal sabor de boca
bastante grande a la mayoría de fans, que vimos como no funcionaba nada: ni el
sonido, ni los pinganillos, ni las canciones, ni nada...Un auténtico estropicio
para un concurso de 4 horas de directo (hora y media más la publicidad) en la
que me faltó más dinamismo y justicia, además de profesionalidad.
Tres de las seis voces de Malú actuaron en primer lugar. Mandy
Santos, Silverio Belmonte y Amynata Sow. A priori, ninguno de ellos me seducía como para pensar que quiero
que sean finalistas, pero por recorrido me hubiese quedado con Mandy, y por la
actuación de anoche, con Amynata. Porque el destrozo de Mandy Santos fue total.
Falló en la elección del tema, falló en sus tablas sobre un escenario y falló
quejándose tanto de los errores de sonido, yendo de víctima del sistema. Ni la
apoyó Malú ni tampoco el público, para mi total sorpresa. Amynata estuvo bien,
aunque un poco deslucida. Tenía un temazo para salirse mucho más. Silverio,
sencillamente, fue desagradable, como casi siempre. Pero ahí está, apoyado en
parte por Malú y sobre todo por el público. Tragedia.
Rosario Flores me
atragantó la noche. Brigitte Emaga,
Gabriele Serrini y Estela Amaya dieron el do de pecho. La señorita Emaga me
parece una gritona de cuidado, aunque su escenografía con ese sillón me
gustaba. Estaba claro que no iba a pasar ella. Gabriele Serrini volvió a
sorprender para bien, aunque no se le oyese nada en las estrofas graves por
culpa del audio. Tuvo cierto apoyo del público y de Rosario, pero no fue
suficiente, como se veía venir. Y eso que nos dio Fiebre. Mucha fiebre. Para mí era finalista. Y lo era junto a
Estela Amaya, las dos grandes voces de la Flores. Estela es todo pasión y
sentimiento, y ayer volvió a hacer gala de ello. Canta sencillo, canta simple,
y canta con facilidad. Así que gusta. Ya dijo Rosario que estamos en el
concurso español y que hay que premiar a los que así nos lo recuerdan. Nada más
que decir. Se ha ganado al público y a su coach.
Y sí, me ha ganado a mí también, aunque prefiriese a Gabriele.
Antonio Orozco
fue, por primera vez, coherente y bueno. No cantando, porque se oían más a sus
voces que a él, pero sí repartiendo votos. Por su escenario desfilaron David Velardo, Jaume Mas y Ainhoa Aguilar.
El señor musicales siempre me ha parecido un "sin más". Mediocre a la
vez que creído, insulso a la vez que correcto. Ni rompe ni sorprende ni mucho
menos me transmite o me incita comprarle un disco. Segundón total. Ainhoa se ha
crecido en cada gala, y anoche fue de lo mejor que vimos. Una lástima que no
haya podido llegar más allá, también era clara finalista. Pero, para ser
justos, si hay una voz, una originalidad, una personalidad y un talento en el
equipo de Orozco de ayer ése es Jaume Mas. Nos tiene cautivados del todo.
Arrasó en porcentajes y volvió a ser lo más. Me encanta.
El que no me gusta nada es David Bisbal. Y menos lo que hizo anoche. Por primera vez en la
historia le he visto hasta inteligente. Pero de los malignos totales. Competían
por un puesto Susana Sheiman, Jordi Galán
y Dina Arriaza. Estaba claro que Susana iba a irse fuera, porque aunque la
mujer es de 10 sobre 10 y no sabe ser imperfecta, el público no tendría empatía
con su estilo ni su personalidad ni su nada. Es de las mejores voces que han
pasado por aquí, y yo me quito el sombrero cuarenta veces, pero no la veo
triunfando. La cosa estaba entre Jordi y Dina, y probablemente muy repartida. A
mí Dina me aburre, y Jordi habría terminado haciéndolo, pero como los vemos
cantar tan poco, aún no lo había logrado. Bisbal fue astuto y decidió dar la
menor puntuación a Jordi y la mayor a Dina, por lo que pudiera pasar. Así lo
confesó y así fue. Aunque Jordi fue el que más porcentaje de votos tuvo del
público (58%) pero como Dina estuvo más que apoyada por Bisbal, finalmente se
salvó ella. Fue el único equipo que metió en la Semifinal al votado por el
coach y no por el público. Muy significativo.
¡FELIZ DÍA VOCAL A TODOS!