sábado, 24 de octubre de 2009

Al séptimo día, Yo creé este blog.



“Los homosexuales podrán casarse por la Iglesia en Suecia […] gracias al voto positivo de 71% de los participantes de la Iglesia Luterana Sueca […] El arzobispo Andres Wejryd, cabeza visible de los luteranos suecos, ha afirmado que “es importante que las sociedades sigan el ritmo de los tiempos””. (ABC 22-10-09)


Suecia se convirtió hace escasas semanas en el noveno país en aceptar el matrimonio civil entre homosexuales (también lo tienen aceptado Holanda, España, Canadá, Islandia, Bélgica, Sudáfrica, Uruguay y el estado norteamericano de Iowa). Uno de estos países, Islandia, cuenta además con una Presidenta del Gobierno abiertamente lesbiana y con pareja estable. Ahora es la Iglesia Luterana de Suecia la encargada de reconocer un derecho básico al colectivo gay.


La iglesia católica sigue pensando que los homosexuales no pueden contraer matrimonio. Ni adoptar hijos, claro. Ni mucho menos salir a la calle. Sobre los preservativos entre gays no se sabe a ciencia cierta –perdón por utilizar ciencia- qué opinan. En los actos oficiales y en algunas misas importantes se sigue obligando a la mujer a llevar una vestimenta determinada. En la iglesia de la Madeleine en París no dejan entrar a ninguna mujer que lleve los hombros descubiertos o una falda por encima de las rodillas. Agárrense que vienen curvas. Pero tápense los ojos, no vaya a ser que las vean desnudas.


Sería fácil atacar al clérigo con sus manifiestos absolutamente retrógrados y machistas. Me resultaría muy cómodo decir que una gran cantidad de “trabajadores” de Dios ha sido acusada en algún momento de su vida por pederastia o violación. Que habitualmente tenían amas de llaves con las que dormían, si es que les daba tiempo de dormir antes de la misa del gallo. Pero no me voy a pronunciar sobre eso. Voy a atacar a la iglesia desde dentro.


¿Qué clase de valores intentan inculcar a la sociedad? ¿Qué clase de ente es Dios? ¿Por qué nos mienten desde el principio? Si nos ponemos a hacer cuentas, los padres de la humanidad son Adán y Eva. Un hombre y una mujer. Uno. Pongamos que hacen el amor y tienen otros dos hijos. Un hombre y una mujer. ¿Cómo lo hicieron para llegar a los casi siete mil millones que somos ahora? Fornicaron entre ellos. Como conejos. Incesto. Pecadores. Malignos. Al infierno todos. Qué chusma. Y esto no es todo:


De pequeño me lo presentaron como un tipo majo. “Jesús es el camino, Jesús es amistad…”. Recuerdo que cuando tenías un problema acudías a él. Y aunque no te hablaba, él te transfería su sabiduría. ¡Qué grande, Dios! Y qué ligero. Pasarse el día entre las nubes y no caerse ni los días de viento es un mérito a reconocerle. El único, eso sí. Hay muchas cosas de Dios que no nos quieren decir…

Dios es un ser débil a las carnes. Para no acabar en la tentación, lanzó toda una serie de pedruscos con fuego (ríete tu de Armaggedon) a Sodoma y Gomorra. Además, es rencoroso de mucho cuidado, y un llorón. 40 días dándole que te pego a las lágrimas para matar a todo cristo -perdón de nuevo-. Sólo se salvó Noé. Ajá. Así que se salvó un hombre. ¿Dios es gay? Uhm… Ahora entiendo a los curas. Tienen una envidia natural (o carnal) del pobre Noé. Y por eso la pagan con el resto de homosexuales. ¿Por qué sino iban a meterse ellos en la vida sexual de los demás... cuando ellos no la practican?



Cuánto mal hace el despecho…
Pero a lo hecho, pecho.
iglesia católica, te odio.

PD: Todas las iglesias sin mayúscula se deben a una escritura consciente. El mismo respeto que me tienen a mí es el que yo vierto con ellos. Cero.


Roberto S. Caudet

5 comentarios:

  1. Me encanta tu entrada y me hace gracia que los curas opinen de cómo deben ser las familias cuando ellos nunca van a crear ni han creado ninguna.

    Pero bueno, contra ese mal poco se puede hacer.

    ¡Saludos Roob!

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  2. con la de maricas que hay en las iglesias, por dios!!
    y son mas putas que las gallinas.
    estoy de acuerdo contigo al 100%
    besotes

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  3. El miedo que infunden las Iglesias es lo terrorífico. No pregonan el amor y la bondad. Atemorizan. De ahí su éxito ante la incultura.
    Yo también te odio.

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  4. Odiemos al miedo que intentan trasmitirnos las iglesias de todo tipo. Pero bueno toleremos tb los pobres ignorantes que las defendien y a ver si con blogs como este entran en razón.

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  5. Eres tremendo. Incluso si no firmaras, sabría que se trata de ti. Puedo escuchar tu voz en cada una de las palabras.
    Además, te confesaré que a veces te imagino como Risto, con tus enormes gafas de sol, dándole caña a todo el mundo.

    Me reservo mi opinión, sólo diré que ese profesor ha conseguido sacar de ti un proyecto interesante. Qué tío.

    Un beso, Roob. Seguiré por aquí.



    _Lau_

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